Adam Dalgliesh regresa a East Anglia, donde pasó su juventud, para investigar la muerte de un seminarista que estudiaba en la Universidad de Saint Anselm. El detective y poeta deberá descifrar la clave que le ofrece una de las víctimas para hallar al asesino. P.D. James demuestra de nuevo su habilidad para observar el comportamiento humano, construir intrigas sorprendentes y evocar los ambientes que rodean a sus personajes.
