La hipertensi—n arterial es un gran problema de salud publica, por la cantidad de personas a las que afecta y por la gravedad de las enfermedades con las que se relaciona, como por ejemplo dolencias card’acas y vasculares.
Precisamente, la hipertensi—n se caracteriza por no producir s’ntomas hasta que aparece alguna complicaci—n, de aqu’ la importancia de su diagn—stico precoz. Los datos de que disponemos nos dicen que el control adecuado de la hipertensi—n s—lo se da en el 30% de los casos tratados, y esto se debe a la falta de informaci—n de la poblaci—n en general.
