ÇTenemos un cuerpo energŽtico, nuestro doble, que nos permite ir a ver el futuro, reparar lo que all’ acontece y volver al presente para vivirlo. Y es durante el periodo nocturno cuando tenemos la capacidad de arreglar ese futuro que hemos construido durante el d’a. A travŽs de la intuici—n que opera en el doble tenemos la posibilidad de detectar los peligros antes de padecerlos y, de este modo, suprimirlos de nuestra vivencia.
ÈEl fen—meno del desdoblamiento del tiempo tiene como resultado un hombre que habita e interactua en el tiempo real y a la vez en el tiempo cu‡ntico, un tiempo imperceptible con varios estados potenciales.