Cuando Arce era un bebŽ diminuto, sus pap‡s, en su honor, plantaron unarbol: un arce.
Arce y suarbol han crecido juntos, y si bien unarbol no es siempre el compa–ero ideal, eso carece de importancia cuando ella tiene ganas de explayarse y gritar, lo cual es frecuente.
M‡s tarde, Arce pasa a ser la hermana mayor y descubre que los bebŽs tambiŽn tienen sus momentos ruidosos. Pero, por fortuna, Arce y su amadoarbol saben bien lo que el bebŽ necesita.
Lori Nichols debuta de la mano de una ni–a irresistible, un esp’ritu libre que recibe con los brazos abiertos tanto el cambio de estaciones como a su nueva hermanita.