Mi profesora creyo que Ryen era un chico, la suya que Misha era nombre de chica y las dos, completamente equivocadas, nos juntaron para ser amigos por correspondencia. A nosotros no nos costo mucho darnos cuenta del error, pero antes ya habiamos discutido sobre cualquier tema posible: Àla mejor pizza de la ciudad? ÀiPhone o Android? ÀEs Eminem el mejor rapero de todos los tiempos?
Y ese fue el principio de todo. Esos fuimos nosotros los siguientes siete a–os.
Ella siempre escribia en papel negro con boli plateado. No lo hacia con regularidad: a veces me llegaba una a la semana. Otras, tres en un dia. Daba igual. Las necesitaba. Ella es la unica que me mantiene centrado, que me habla y que acepta todo aquello que soy. Solo tenemos tres reglas. Sin redes sociales, sin telefono, sin fotos. Teniamos algo bueno. ÀPor que arruinarlo?
Hasta que un dia, encuentro la foto de una chica llamada Ryen, que ama la pizza de Gallo’s y adora su iPhone. ÀDemasiada casualidad? Joder. Necesito conocerla. Solo espero no acabar odiandola.
RYEN
No me ha escrito en tres meses. Algo pasa. ÀSe habra muerto? ÀEstara en la carcel? Conociendo a Misha, cualquier opcion es posible. Sin el, me estoy volviendo loca. Necesito saber que alguien me escucha. Y es mi culpa, debi pedirle su numero de telefono, o una foto. Algo. Puede que se haya ido para siempre. O puede que este delante de mis narices y no ni siquiera saberlo.