La publicaci—n de las homil’as del Papa Francisco est‡ resultando un acontecimiento esperado, incluso deseado. Son muchos los fieles que las leen cotidianamente como meditaciones personales, un ejercicio, que en la espiritualidad cat—lica es la forma m‡s sencilla de oraci—n mental. Y es precisamente con el t’tulo de meditaciones diarias, con el que se publican estas homil’as en el sitio oficial de la Santa Sede. Y, dada su naturaleza de texto homilŽtico, constituyen una referencia para muchos sacerdotes en la preparaci—n de sus propias homil’as.