Los asesinatos no son cuesti—n de risa. Bien lo sabe Vish Puri, el detective m‡s privado de la India, maestro del disfraz y amante de la comida frita y picante, que se halla volcado en la investigaci—n de la extra–a muerte de un conocido cient’fico. El doctor Suresh Jha muri— de modo repentino mientras realizaba sus ejercicios matutinos en el Club de la risa de Delhi. Puri no comparte la opini—n de aquellos que atribuyen el hecho a una diosa y, para probar que est‡ en lo cierto, rastrear‡ -junto a su peculiar equipo de ayudantes- desde los suburbios m‡s pobres a los clubes m‡s selectos, y viajar‡ de Delhi a la ciudad sagrada de Haridwar, a orillas del Ganges.